Hasta ahora, China es absolutamente líder en la industria mundial del aluminio. En 2023, las exportaciones de aluminio de China alcanzaron los 5,287 millones de toneladas, lo que representa alrededor del 35% del comercio mundial total.
En cuanto a capacidad, China tiene ventajas absolutas. Su producción de aluminio primario representa el 59% del total mundial, los perfiles de aluminio representan aproximadamente el 66%, el aluminio electrolítico representa el 60% y el aluminio fundido representa casi el 60%.
Según los datos del USGS, la producción de aluminio fundido de China fue diez veces mayor que la de los dos primeros países de India. La producción total de otros países del mundo representó sólo el 70% de la de China.
Como un recurso básico extremadamente importante, los productos de aluminio juegan un papel clave en la construcción, el transporte ferroviario, el automóvil, el cable y otras industrias. Debido al súper estado de los productos de aluminio chinos en el mundo, casi todos los países no pueden prescindir de los productos de aluminio de China.
En los últimos años, Estados Unidos ha impuesto varias medidas comerciales para prohibir la importación de productos de aluminio chinos. Pero sigue siendo el mayor comprador y el mayor importador de productos de aluminio chinos del mundo.
El aluminio electrolítico es un "gigante consumidor de energía" en la cadena de la industria del aluminio, lo que ha restringido seriamente el desarrollo de la industria del aluminio en otros países y regiones. Según las exportaciones chinas de aluminio del año pasado, se consumieron al menos 740 GW de electricidad, lo que equivale a la instalación fotovoltaica total de China a finales de septiembre.
El suministro de energía es insuficiente y ha surgido la crisis energética. La reducción de las exportaciones de aluminio de China significa una gran cantidad de reacciones en cadena para los países de todo el mundo y la posterior reevaluación de las capacidades industriales de China.
